Valores de Tolerancia y Aceptación

Imagen cortesía de Julieta de Jesús

Reconociendo nuestra singularidad sin arrogancia ni complejo de superioridad, nos permite aceptar a el projimo y nos permite hallar el verdadero valor del ser para interactuar adecuadamente con los demás.  Respetando el espacio e ideas ajenas y entendiendo que todos somos útiles y parte integrante de la comunidad.

Cuando no nos aferramos a lo material, sino que valoramos la esencia espiritual de los otros individuos y vemos más allá, estamos haciendo uso  del conocimiento, pero si profundizamos  y entramos en el territorio de la fé, nos damos cuenta de que podemos ser mejores personas.

El amor de María es como el sol, nos alimenta, nos cubre, nos da vida.  La luz espirítual de María nos revela a Nosotros mismos, por eso manteniendo activa nuestra comunicación con ella a través de la oración, ejercitando el pensamiento puro, alcanzamos la liberación de las ataduras del rencor y nos permite abrigar amor, tranquilidad y paz, eso es la fortaleza espirítual para vivir una vida verdaderamente plena.

                                                 Imagen cortesía de Jossé Pareja


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